Miércoles 10 de abril de 2024
Práctica del Módulo 1: Introducción a la igualdad y no discriminación
El tema que he escogido para darlo a conocer y reflexionar sobre ello es el de la glotofobia. El neologismo "glotofobia" (gloto: lengua, y fobia: odio) es un término acuñado por el lingüista francés Philippe Blanchet (1) en el año 2016 para referirse a la discriminación lingüística a partir de la pronunciación de las personas. Es un rechazo poco visible, sin embargo, hay constancia de que esta forma de discriminación existe desde el S.XVI en España. Durante más de tres siglos, la RAE definió "sesear" como "pronunciar la /c/ como /s/ por vicio o por defecto orgánico"
Ejemplo más actual de esta discriminación en España lo encontramos en acontecimientos sucedidos en el Congreso de los Diputados en los que algunas disputadas andaluzas son discriminadas por su acento o sus expresiones (2) por parte de otros partidos políticos, lo que llevó, incluso a Unidas Podemos a presentar una iniciativa para evitar el estigma por la forma de hablar. En 2017, Ramón Silva, afín a Pedro Sánchez que ganó la secretaría general del PSOE a Susana Díaz declaró textualmente "Queremo un PZOE ganadó". En todos estos casos la discriminación fue directa y abierta, sin ocultación. Las personas manifiestan que la razón que motiva la diferencia de trato y objeto de burla es el acento.
En el mundo del cine en el filme Toy Story en versión original cuando Buzz Lightyear se estropea pasa de hablar en inglés a hablar en español latino. En la versión española cambia al acento andaluz. (2)
En el ámbito laboral para presentar informativos se ha buscado durante muchos años un acento más tipo neutro. En el mundo del cine y doblaje también porque es más rentable hacer un doblaje al español que veinte.
El colectivo objeto de discriminación en España sería todo aquel que tiene un acento que le distingue como originario de una región específica. Pero, ¿existe realmente un acento neutro? (3) Pues la verdad es que casi todos tenemos acento y el acento neutro es minoritario. También existe la autoglotofobia que es la vergüenza de ser leísta, laísta, de sesear, etc.
Esta discriminación es una forma de apartar a cualquier persona de la sociedad mediante la imposición de una variedad lingüística que se encuentra en una situación privilegiada. La solución no es sencilla. Requiere de un enfoque multidisciplinar. Quizás hacer como en el caso de Francia penalizar de forma efectiva los casos de discriminación (4), pero también es muy necesario educar en la riqueza que aporta la diversidad de acentos. En el ámbito laboral, las empresas deberían fomentar políticas internas que profundicen en una cultura de la diversidad y de la integración autonómica. Los medios de comunicación pueden dar visibilidad a los casos de discriminación por el acento y fomentar el debate social
Fuentes:
(1) Glotofobia: la xenofobia de los acentos - Ideas imprescindibles
(5) Imágenes (419×120) (gstatic.com)
Comments
Post a Comment